[Deporte Escolar] Las Niñas Que Sacan La Cara Por Boston College En Tenis Femenino
El tenis es uno de los deportes que más alegrías le ha dado a Chile. A pesar de esto, el surgimiento de jugadores es increíblemente difícil y solamente se puede ser profesional gracias al apoyo familiar, principalmente económico, debido a que los costos son altísimos, en zapatillas, raquetas, entrenadores y principalmente viajes al exterior. Si es complicado que un varón salga, en una mujer es casi el doble.
La mejor referencia y casi única en Chile es Anita Lizana, que llegó a ser número uno del Mundo en 1937, ese mismo año ganaría el US Open. Logros que son casi impensados en la época contemporánea.
A pesar de no perseguir un sueño tan alto, las niñas de Boston College entrenan diariamente para ser las mejores en sus categorías, demostrar que pueden superarse y que también pueden triunfar.
Geraldine León tiene 15 años y acaba de ser campeona en el torneo Efraín Viruta González, en la categoría menores de 16. Juega desde los 12 y es uno de los grandes talentos que hay en las Águilas. “Yo quería jugar fútbol y en mi casa no me dejaron, entonces había también un taller de tenis y decidí inscribirme”, cuenta León de su anecdótico comienzo en el deporte blanco.
“Ahora están orgullosos de mi, pero todavía no me dejan jugar fútbol, aunque ya no quiero porque soy mala, jaja”. Fuera de risa, Geraldine asegura que es muy difícil surgir como tenista en Chile, sin embargo, agrega que tampoco lo intentará, ya que se dedicará a estudiar una vez que termine la enseñanza media.
El caso de Fernanda e Isidora Tapia es muy curioso, ambas tienen 13 años y son hermanas. Hace menos de una semana se enfrentaron por la final del Viruta González, en la categoría de menores de 14, el triunfo fue para Fernanda.
Ambas hacen una pausa en su entrenamiento para comentar sobre sus participaciones en los torneos de este año, donde las dos llegaron a semifinales del Mario Caracci. “Siempre vamos por más, pero el nivel de ese campeonato es distinto, es mucho más alto”, comenta Isidora.
Sobre su futuro, Fernanda es cauta y prefiere pensar en eso más adelante “Ya se verán las posibilidades de seguir jugando o estudiar”, explica.
Ninguna de las chicas tiene una ídola o alguien en quien reflejarse para ir aprendiendo más sobre el tenis, pero al ser consultadas sobre su torneo favorito la respuesta fue unánime. Al mismo tiempo contestaron “Roland Garros”, quizás porque es en arcilla, la misma superficie donde entrenan en Santiago, quizás sin las mismas comodidades pero con las mismas ganas.